El borrador de la nueva ley del aborto garantizará la interrupción voluntaria del embarazo en la sanidad pública y termina con la exigencia del consentimiento paterno para las chicas de 16 y 17 años, entre otras medidas.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, interviene en una sesión de control al Gobierno en el Senado, a 8 de marzo de 2022, en Madrid (España).
LOS RÁBANOS POR LAS HOJAS / Una adolescente podrá abortar con 16 años sin permiso de los padres, pero no puede beber alcohol, ni conducir, ni trabajar, ni votar. Si comete algún delito bajo estos conceptos, quien se hace cargo de los daños ocasionados ante terceros, recae en el jefe de familia, mientras éste tenga la patria potestad.
El borrador de la nueva ley del aborto garantizará la interrupción voluntaria del embarazo en la sanidad pública y termina con la exigencia del consentimiento paterno para las chicas de 16 y 17 años, entre otras medidas.
Estando a la espera de que el texto llegue al Consejo de Ministros el próximo martes, las menores a partir de los 16 años ya no necesitarán consentimiento por parte de los padres para abortar, aunque las menores todavía no podrán beber alcohol, viajar, votar o trabajar, derechos que se permiten legalmente a partir de la mayoría de edad.
Es evidente que los/as adolescentes ha avanzado en madurez. Esta mayoría de edad podría rebajarse a los 17 o 16 años pero existen numerosos intereses ideológicos, políticos o partidistas que impiden este avance,
A falta de lucha de clases, el comunismo creó la lucha de sexos y alumbró con ella dos leyes abiertamente inconstitucionales que acaban con el sagrado principio democrático de la igualdad: la de libertad sexual (conocida por ley del «solo sí es sí») y la llamada Ley trans. Vendrá la del aborto y amenaza con más, con generar problemas para aportar esa «solución» que rompa en dos la sociedad, que genere caos, crisis, excepcionalidad… germen.
Análisis en clave liberal 
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