¿Quién se fía del CNI de España?

A muchos ciudadanos las siglas quizás les digan poco o se queden estupefactos: se trata del Centro Nacional de Inteligencia, que el PSOE y sus adláteres están controlando, de forma felona y sectaria, como están haciendo con el resto de los resortes del poder.

Por Pedro Arce / En CANTABRIA LIBERAL / A muchos ciudadanos las siglas quizás les digan poco o se queden estupefactos: se trata del Centro Nacional de Inteligencia, que el PSOE y sus adláteres están controlando, de forma felona y sectaria, como están haciendo con el resto de los resortes del poder.

Es decir, la propia presidenta del Congreso abre la puerta a que puedan entrar ERC y Bildu, como en el pasado entró Pablo Iglesias, en la Comisión de Secretos del Congreso, para que puedan controlar los entresijos de la seguridad de España y pasárselos al enemigo. Esto es un cambio de las reglas del juego a mitad del partido, que perjudicará seriamente a España en el contexto internacional. Y a los independentistas, que estaban tratando de romper España, ahora les ofende que hayan sido espiados.

Para muchos españoles es como meter el zorro en el gallinero, pues entran en los secretos del Estado español los partidos que están contra España, contra su Constitución y que apoyan a Putin, en la invasión, que no guerra, de Ucrania.

Los separatistas españoles han puesto el grito en el cielo, a pesar de que «el papel del CNI es velar por la seguridad nacional y el separatismo es una amenaza que hay que controlar», salvo que Pedro Sánchez esté en el bando de quienes quieren destruir España y sus instituciones, incluida la Corona, cuyo representante, el Rey Felipe VI, está medio secuestrado por la Gobierno de Pedro Sánchez, atado de pies y manos y sin posibilidad alguna de hacer oír su propia voz.

Y, lógicamente, los demás países occidentales, como la Unión Europa, EE. UU. o la OTAN, no se fían de España, no la convocan y saben que cualquier estrategia va a acabar enseguida en poder del enemigo, pues saben que el gobierno social-comunista no es de fiar. Lógicamente, los demás servicios de inteligencia del mundo occidental no se fían de España ni un pelo y máxime cuando los enemigos de España rechazan la cumbre de la OTAN que se pretende celebrar en España en junio próximo.

España se ha convertido en Europa y el mundo entero en un país insignificante, que solo tiene hilo director con las dictaduras de Venezuela, Cuba, Irán o Corea del Norte, por poner algunos ejemplos; y acaba de hacer el más absoluto ridículo en el Magreb (Argelia y Marruecos), dejando tirados en la cuneta a los saharauis y ello después de traer furtivamente a su líder a curarse en España. Y los partidos conservadores y democráticos, como el PP y Vox, harán bien en apartarse lo más posible de estos desalmados y antipatriotas de izquierdas.

El CNI está absolutamente desprestigiado en el contexto internacional y el principal culpable es Pedro Sánchez, hasta el punto de que algunos agentes secretos quedarán al descubierto, con los graves riesgos para su integridad personal. Jamás un dirigente generó tamaña felonía e irresponsabilidad.