¡Pudo ser peor!
Merecían una sanción ejemplar y el pueblo español decidió ‘fusilarlos’ en las elecciones generales. El daño infringido a España fue tal que el odio creció entre los españoles a pasos agigantados. Sin duda, la palabra «socialismo» se convirtió en el vocablo más macabro del ‘palabrero’ español. Hasta los propios leoneses sintieron vergüenza de haber ‘soltado’ de allí a un inútil integral y a un miserable vendeburras como José Luis R. Zapatero. La vergüenza y la corrupción socialista se instalaron en España y ahora deben hacer la travesía del desierto para estar preparados, invadir la calle e incendiarla contra Marianico Rajoy. No tienen otra salida. Eso sí, cuentan con una ventaja: cada vez somos más los que estamos dispuestos a encender la hoguera contra la derecha ‘mariana’, cada vez más mentirosa, deficiente y rastrera. ¿Acaso no lo han demostrado en estos tres últimos meses? Doy fe de todo ello.
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