Alguien debe decir al presidente Herrera que se ha equivocado. Todavía es posible salvar a Rosa Valdeón para la causa y ésta no es otra que seguir dignificando Castilla y León. Actualmente se miran de reojo los propios consejeros en cada Consejo de Gobierno; saben que más de la mitad de ellos son platos de segunda mesa. Ni Castilla ni León pueden permitirse otros cuatro años de espera e inmovilismo.
¿Alguien pensó en la consejera Valdeón para presidir Castilla y León? Nosotros sí lo hemos pensado y, por si acaso, Juan Vicente debería atar la silla antes de que Rajoy dispare por elevación. Si Herrera entra en la carrera de ministrable para Mariano Rajoy, dos mujeres se van a ver enfrentadas por la mala cabeza de Herrera Campo y su abundante cómputo de despropósitos. ¿Quiénes? Pues las mejores: Rosa Valdeón y Silvia Clemente. ¡Ata la poltrona, Juan Vicente!
Debe estar conectado para enviar un comentario.